PABELLÓN DE MÉXICO, TERESA MARGOLLES

En este blog somos entusiastas de la obra de TERESA MARGOLLES, artista tremenda donde las haya.
El palacio Rota-Ivancich es obra de Jacopo Sansovino, uno de los arquitectos más importantes del manierismo italiano, actualmente se encuentra en un preocupante estado de decadencia y deterioro. En este particular contexto se desarrolla una acción de TERESA MARGOLLES consistente en el fregado de los suelos del palacio a base de agua mezclada con sangre de personas asesinadas en México por parte de familiares de éstos. El grado de realismo es tal que hasta se puede percibir el olor a sangre a medida que recorremos las salas de este edificio. También nos podemos encontrar unas telas impregnadas de sangre recogida de escenarios en los que se han desarrollado actos violentos relacionados con las mafias del narcotráfico, sobre estas telas se bordan en oro los característicos "narcomensajes" como "VER OIR Y CALLAR", "PARA QUE APRENDAN A RESPETAR"... Cuando finalice la muestra de la Biennale, estas telas serán emparedadas tras los muros del palacio.
La exposición de MARGOLLES para la Biennale es sencillamente sobrecogedora, resulta imposible mostrarse indiferente ante ésta, resulta imposible no implicarse.
Ella ya nos sorprendió hace un año en la última edición de la bienal MANIFESTA celebrada en Trento y Bolzano con la obra más extraña y más interesante de todas: una siniestra sala en un edificio industrial que es pulverizada con vapor procedente del aire de un tanatorio mexicano.
El gestor y comisario de esta exposición no es otro que Cuauhtémoc Medina, un gordito divertido y encantador por el que nosotros sentimos un especial cariño.